Amorino
La franquicia Amorino se distingue por su visión de continuar con la tradición italiana para la preparación de helados artesanales, así como por su cuidadosa selección de materias primas. De hecho, la leche es fresca, los huevos son ecológicos y las frutas son frescas. Un ejemplo es el mango procedente de India, el pistacho siciliano de Bronte o las avellanas traídas de Langue (Italia).

La diversidad es palpable en los 24 sabores distintos tanto de cremas como de sorbetes que la franquicia Amorino ofrece a sus consumidores. A estos productos se suman los sorbetes, el té, las exquisitas “Delizie d´Italia”, frutos secos que se presentan recubiertos de chocolate, así como chocolates delicadamente escogidos; todos ellos con una presentación exclusiva. Amorino, así, ofrece una extensa gama de productos para degustar todo el año.

Las franquicias Amorino emanan calidez. Su decoración está hecha con materiales nobles tales como la piedra, el roble macizo y el mármol. Destacan por los tonos marrones y la figura de Cupido, emblema de la marca, elementos que configuran un entorno cálido y agradable.